TRIGESIMA NO SE CUANTAS COMIDA DE HERMANDADPues sí señores, aprovechando nuestra siempre predisposición para comer, beber y estar un rato con los amigos, el día 27 de mayo del corriente año ( II de crisis), a pesar de todos los pesares, hicimos la comida de hermandad que como final de curso senderista, hacemos todos los años por estas fechas.
El lugar elegido, fue el paradisiaco jardín de la casa de Reina, en Pizarra.
La comida, esta vez la organización nos sorprendió con un plato que nunca habíamos degustado: ¡CALDERETA DE CORDERO¡ acompañado como siempre de aperitivos y entrantes a base de chacina de la mejor calidad y chuletitas, que a la brasa, estaban de rechupete, todo ello regado con cerveza y vino en abundancia y calidad.
Nos acompañaron nuestros incondicionales amigos de siempre, a los que desde aquí les damos las gracias por su inestimable asistencia. Como en anteriores ocasiones, no faltó el recuerdo doloroso de los que para siempre nos dejaron,
En amena charla y franca camaradería, transcurrió el ágape ( ya sé que suena a cursi, pero no he podido evitarlo).
Se hizo el proyecto de hacer la última etapa antes del obligado descanso estival, y en esta ocasión se decidió por mayoría acometer la Senda de la Estrella, etapa emblemática donde las haya, y para estas fechas, con el deshielo de la Sierra y la floresta en todo su apogeo, promete ser de ensueño.
Cafelito, copita y racaneo de unos cuantos para escaquearse de fregar platos vasos y cacharros, y tras las consabidas partidas de dominó, cada mochuelo a su nido, para ver el partido Barça-Manchester, y que en esta ocasión fue el broche de oro para una temporada sin igual para el equipo catalán.
P\D Los buitres de la organización, han tenido en esta ocasión un sorprendente detalle, y es que han sobrado 70 euros, los cuales han sido reinvertidos en números de loterías y combinaciones de la euro primitiva, me imagino que para repartir en caso de que toque, entre todos los asistentes. Este detalle, insólito por cierto, ha hecho derramar hasta lagrimas de agradecimiento entre algunos de los asistentes y todos coinciden en afirmar que a partir de ahora, creen a pie juntillas en honestidad de las personas.
A. Fernández
